Una Iniciativa que nace de una visita a unas viñas y una masía abandonada, próximas a la prisión de Can Brians, y de ahí crear un vino que transmitiera pasión por la viticultura y la enología y la integración social y laboral de los presos. Una aspiración llevada a cabo por Josep Raventós y el equipo de enología de Raventos i Blanc.


Más allá de las paredes de Can Brians
El resultado es un xarelo ecológico de mínima intervención vestido con etiquetas que llevan impresas las huellas dactilares de varios presos y algunas frases en las que opinan sobre sus condenas. La venta sólo se hará a través de la Fundación Ared que preside Judit Mascó. El dinero recaudado se destinará a la reintegración de mujeres de la presión Wad-Ras y a obras en Can Brians 2. Para este cometido, también se ha contado con diferentes colaboradores, y entre ellos Varias Impressors, participando con la impresión de las etiquetas. Nos sumamos gustosos a este proyecto en línea con los valores de nuestra compañía.
